Después de las versiones y virtuales presiones que generaron -y generan- los chimentos vertidos en varios medios de comunicación hegemónicos sobre supuestas disputas, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, dio por tierra con esos dichos y aseguró que no dejará que lo "lleven al terreno de pugilato y de disputa" con el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, en medio de la lucha ante la pandemia del coronavirus.
"Me resisto a que me lleven a un terreno de pugilato y de disputa", dijo Kicillof, en una nota realizada por Infobae, ante el supuesto escenario de desacuerdos entre la Ciudad y la provincia de Buenos Aires frente a la pandemia.
"Veo que hay un cansancio, un hartazgo de muchos. Angustia. Veo que el fondo de todo eso es miedo, que aún en los que están angustiados para salir hay miedo. Lo que tenemos que caer en la cuenta es que la probabilidad de morirnos subió por algo que antes no existía y que puede matar", expresó.
"No estoy en una pulseada con el intendente de la ciudad. Estoy tratando de aplicar ese criterio y estoy convencido de que es muchísimo más efectivo cuando las medidas entre la Ciudad y la Provincia coinciden, que cuando decimos cosas distintas", planteó.
"Para mí es claro como el agua: suben los contagios, y cuando suben los contagios hay más gente que se va a morir. La única forma de bajar los contagios es generar más aislamiento y menos circulación de gente", explicó.