Miles de personas protestaron en Panguipulli, en la sureña provincia chilena de Valdivia, tras el asesinato de un joven malabarista a manos de Carabineros, en unas manifestaciones que terminaron con un total de una decena de edificios públicos totalmente destruidos por incendios.
Un tribunal chileno dejó bajo detención este sábado al policía, cuya identidad se mantiene en reserva, quien fue detenido luego de haber disparado al menos cuatro tiros al artista callejero Francisco Martínez, a plena luz del día en una concurrida calle de Panguipulli.
El policía fue llevado el sábado ante un tribunal de Justicia para un control de detención, audiencia que se trasmitió en internet en la que se determinó que "el imputado quedará detenido" hasta el lunes cuando la Fiscalía presente las acusaciones en su contra y se inicie la investigación del caso.
El suceso que originó la protestas comenzó el viernes cuando el malabarista estaba realizando un número utilizando machetes sin filo y el personal policial quiso impedírselo, lo que generó una discusión que terminó con uno de los agentes disparando en contra del artista, según un video del hecho que fue ampliamente difundido por canales locales y en redes sociales, citó Agencia Télam.
Entretanto y tras los incidentes en la protesta popular, el comandante del cuerpo de Bomberos local, Rodolfo Zúñiga, dijo que las labores de extinción de las llamas continuaron hasta la madrugada y que lograron controlar la emergencia, según el portal web de la cadena de radio chilena Bío Bío.
Si bien el directivo no entregó una lista completa de las instituciones, Bío Bío informó que entre los edificios siniestrados está la Municipalidad, la oficina de Correos, el Registro Civil, el Juzgado de Policía local, entre otros y aseguró que se registró un intento de saqueo contra una sucursal del banco BCI.
"Lamentamos como Municipalidad la pérdida de este joven malabarista. Yo espero que las responsabilidades se establezcan a través de los tribunales y que se haga justicia", declaró por su parte Ricardo Valdivia, alcalde de Panguipulli, a radio Cooperativa.
Personas que presenciaron el incidente comenzaron a gritar en contra del uniformado que disparó contra el joven, lo que derivó en las manifestaciones para exigir justicia.
Antes de los incendios, la policía utilizó gases lacrimógenos y carros hidrantes, según mostraron los medios locales.
Carabineros respaldó al agente y aseguró que utilizó su arma "en resguardo de su propia integridad, de su propia vida" y "dentro de la legítima defensa propia", según Boris Alegría, teniente coronel de la Policía de Panguipulli, en un video difundido por la institución.
En tanto, el Gobierno ordenó a Carabineros entregar todos los antecedentes del hecho al Ministerio Público, que inició una investigación para esclarecer las responsabilidades de la muerte del artista callejero.