En el cuartel de Bomberos de Pilar todo es tristeza, indignación y bronca. Su perra rescatista, Almendra, murió el jueves, envenenada por ladrones que intentaron ingresar a la casa de su dueño, el voluntario Leonardo Silva.
La Golden Retriever había sido adiestrada para la búsqueda de personas y participó en varios operativos de rescate, como el que dio con Candela Sol Rodríguez, la nena de Hurlingham cuyo cuerpo fue hallado en una bolsa. Hace apenas días, estuvo acompañando a los bomberos en los trabajos por las inundaciones ocurridas en La Plata y el Gran Buenos Aires.
El día que Almendra buscó un cadáver en el Paraná. ACÁ.
Durante el atraco, los ladrones también envenenaron y mataron a Jorgito, otro perro que Silva tenía como mascota en su vivienda de la calle Zeballos, en Pilar.
“Hoy es un día de mierda y muy triste para mí. Quisieron entrar a robar a mi casa, me envenenaron los perros. Siento un dolor y una angustia que, con el apoyo de mi familia, compañeros bomberos y amigos, espero poder superar”, se lamentó el bombero, a través de un mensaje en su cuenta de Facebook.
En la red social se pueden ver una gran cantidad de fotografías que muestran a Almendra prestando servicio, con el uniforme que la identificaba como miembro del cuartel.
El hecho ocurrió cuando el hombre escuchó ruidos y vio que dos delincuentes intentaban entrar a su casa, por lo que inmediatamente llamó a la Policía. Minutos más tarde, los dos animales que tenía a su cuidado comenzaron a sentirse mal.
"Él descubrió que Almendra se comportaba rara. Llamó al veterinario, pero no pudieron hacer nada. Estaba envenenada", aseguró el Jefe de Bomberos de Pilar, Enrique Pared.
Los voluntarios despidieron ayer mismo los restos de la perrita, calificándola como “un bombero más”.
12 de abril