Desde la Casa de Gobierno provincial, el jefe de Gabinete de la Provincia, Carlos Bianco, aclaró que "no hemos llegado a una nueva normalidad" y que la nueva etapa que se inicia "es una prueba". A partir de hoy abrirán todas las fábricas en los 35 distritos que hasta ahora estaban en cuarentena estricta, con los protocolos acordados y el traslado de los empleados a cargo de cada empresa.
El ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, explicó que la provincia pudo frenar el crecimiento de los casos en el distrito y aprovecharon el tiempo para sumar más insumos sanitarios. "En este momento tenemos en stock lo suficiente para proteger a los trabajadores de salud de acá hasta noviembre", dijo el titular de la cartera sanitaria, en la presentación de la nueva fase de la cuarentena en el conurbano.
En este modo, explicó que "está bajando el porcentaje de gente que se enferma y necesita una cama de terapia intensiva. Esto nos permite recalcular los tiempos para el colapso del sistema". Así, Gollan remarcó la importancia de que la ritmo de crecimiento se mantenga estable. "Aplanar la curva implica distribuir los casos para que no colapse el sistema", subrayó.
Por otro lado, el ministro bonaerense remarcó los días de cuarentena estricta funcionaron para seguir mejorando el sistema de salud bonaerense. "Recuperamos ambulancias que estaban hace dos años paradas", precisó. Además, explicó: "Hemos llegado a aumentar la cantidad de camas de terapia intensiva del AMBA de 833 a 2201".
"Para nada es un fin de la cuarentena. Estamos en el peor momento de la pandemia, tenemos que ser muy cautos y precavidos", dijo el jefe de Gabinete, Carlos Bianco, y retomó la definición de "cuarentena intermitente". "Es una etapa de prueba para ver qué suceda con el ritmo de contagio, la duplicación de casos y la ocupación de camas de terapia intensiva", insistió Bianco y advirtió "en cualquier momento podemos dar una marcha atrás".
Con esa advertencia, que marca el tono de preocupación del gobierno provincial, Bianco informó que los 35 municipios del AMBA volverán a fase 3 a partir de este lunes de "manera escalonada", manteniendo la restricción para trabajadores esenciales en el transporte público, al igual que lo ordenó el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Mientras que toda la provincia continuará trabajando con el sistema de cinco fases.
De esta manera, en el AMBA, a partir del lunes abrirán las empresas que fueron cerradas hace tres semanas cuando el avance de la pandemia llevó a la imposición de una cuarentena más estricta. Cada empresa abrirá con protocolos sanitarios y con transporte propio para el traslado de sus trabajadores.
A partir del miércoles 22 será el turno de los comercios barriales, incluyendo, los locales textiles, con la particularidad de que deberán atender sin dejar ingresar a los clientes al local. En tanto, el lunes 27 se retomarán varios actividades privadas, entre ellas, la novedad de las peluquerías y lugares de estética.
En el interior de la provincia de Buenos Aires, donde hay fase 4, incorporarán: servicios de comida y bebidas para consumo en locales, servicio doméstico, obra privada de construcción, comercios de cercanía textiles y de juguetes con ingreso a local y salidas de esparcimiento.
Hasta hoy, en la provincia, exceptuando los 35 municipios del AMBA, 9 distritos se encontraban en fase 3, 27 en fase 4 y 64 en fase 5. Bianco anunció que se modificará la metodología para habilitar el pase de cada fase y precisó que los distritos en fase 5 serán aquellos que, en dos semanas, hayan tenido menos de 10 casos cada 100 mil habitantes, con una revisión cada 15 días entre una fase y otra.
Además, el jefe de gabinete precisó que se acelerará el mecanismo para habilitar nuevas actividades en cada distrito. Hasta el momento, el pedido elevado por los intendentes debía conseguir la aprobación provincial y luego nacional, pero a partir de esta fase la habilitación de las actividades se realizará "en bloque" y cada jefe comunal decidirá si la abre en su municipio y mantiene la restricción.
El jefe de gabinete bonaerense estuvo acompañado por el ministro de Salud, Daniel Gollan, quien dio detalles del estado del sistema de salud provincial y recordó que el objetivo principal continúa siendo "pasar todo esta pandemia sin que el sistema colapse".
Logros, cuidados y convocatoria a donar plasma
La conferencia comenzó con un repaso del ministro Gollan sobre las medidas tomadas en los meses de pandemia, en las que resaltó que, en caso de no tomarse la medida restrictiva del 1 de julio, el aumento de casos hubiese sido mucho más alto y lo que ocurrió fue un "aumento achatado", que podría haber disparado hasta más de dos mil casos más por día y hubiese quebrado el punto de saturación del sistema.
En ese sentido, el ministro destacó que el indicador principal que utilizamos para definir las reaperturas es el "cómo crece día a día los casos de ocupación de camas". "Cuando lleguemos a una saturación de camas que ponga en peligro la cantidad de camas, si es que ocurre, habrá que tomar medidas más fuertes. Todo el tiempo lo dijimos, aplanar la curva, distribuir en el tiempo la cantidad de casos y esperar que llegue la vacuna".
Para evitar esa temida saturación del sistema de salud, Gollan volvió a insistir en la donación de plasma a las personas recuperadas de Covid-19 e inició un plan pionero de tratamiento con plasma. El ministro señaló que, hasta el momento, los tratamiento permitieron que el 11% de las personas que recibieron el tratamiento se recuperarán, mientras que el 43% de las personas que no recibieron plasma fallecieron.
"En este momento, la provincia cuenta con 102 donantes de plasma, que lo hacen todas las semanas", indicó Gollan al solicitar que más donantes se acerquen al programa, cuyo objetivo es duplicar la capacidad de producción. "Nos permitiría que no entren a terapia de 120 a 140 pacientes por semana", sostuvo el ministro.
En materia de prevención, Gollan destacó que hay un promedio diario de 5500 test de PCR y esperan poder ampliarlos con los testeos de producción nacional, para llegar a los 8 mil testeos por día.
"También había que cuidar al personal esencial de la salud, si ellos se enferman el impacto es muy grave para la atención", advirtió el ministro y recordó cómo en el inicio de la pandemia no se conseguía "ni el 25 %" de los insumos para el personal esencial, pero hasta el momento, se logró adquirir 5 millones de barbijos N95, 23 millones de guantes, 1 millón de máscaras. "En este momento tenemos en stock lo suficiente para proteger a los trabajadores de la salud hasta noviembre".