La Policía de la Ciudad detuvo mediante tres allanamientos a dos delincuentes de nacionalidad venezolana que se hacían pasar por choferes de una aplicación de viajes de alquiler para robarles pertenencias a pasajeros.
Personal de la División Robos y Hurtos formó parte, junto a efectivos de la DDI de Tigre, de tres allanamientos para dar con una organización destinada a estafar a pasajeros en viajes para sustraerles elementos de valor.
El hecho denunciado ocurrió el pasado 24 de enero, cuando una pareja arribó al Aeroparque Jorge Newbery y pidió un auto en una aplicación de viajes con destino a Benavídez, en la provincia de Buenos Aires.
Al momento de asignarse el viaje, el conductor le envió preguntas por la plataforma a la solicitante sobre cuántas personas solicitaban el servicio, las edades y si tenían equipaje.
Además, el chofer indicó que no le funcionaba el baúl, por lo que las maletas tendrían que ubicarlas del mismo lado, al lado de la ventanilla. Esa actitud llamó la atención de los clientes y uno de ellos se quitó un reloj de alta gama que portaba para esconderlo entre sus prendas.
Seguidamente, instantes antes de arribar a destino, el automóvil fue interceptado por dos vehículos que le obligaron a detener la marcha y sus ocupantes descendieron para dirigirse hacia el lugar donde estaban las maletas. Al increpar a las víctimas, les solicitaron que entregaran el reloj y otros objetos de valor.
En consecuencia, se inició una causa por "Robo agravado por el uso de armas" con intervención del Juzgado Nacional de Rogatorias, a cargo del doctor Gabriel Ghirlanda y ante la Secretaría Única del doctor Gabriel Bustos, en el marco de un exhorto librado por el Juzgado de Garantías Número 2 del Departamento Judicial de Tigre del doctor Orlando Díaz.
Las órdenes fueron solicitadas a tres destinos en la Ciudad de Buenos Aires, por lo que se le requerió a la División Robos y Hurtos que encabece los allanamientos.
El primer procedimiento se hizo en la avenida Rivadavia al 2600, en un local destinado a la compra, venta y reparación de teléfonos celulares. Allí, se identificó a la propietaria, pero no se hallaron elementos de interés.
Luego, los efectivos arribaron a Urquiza al 200 e ingresaron junto a personal del DOEM y logrando la detención de uno de los delincuentes imputados, de nacionalidad venezolana y de 26 años, además de secuestrar siete teléfonos celulares y un automóvil Renault Logan utilizado para cometer el ilícito.
El otro destino fue en Valentín Gómez al 3000 y se observó salir del inmueble a otro de los sospechosos (el conductor que llevaba a las víctimas), también venezolano y de 35 años, logrando su detención. Los oficiales le incautaron dos celulares.