Caso Carolina Píparo

Abogado defensor dijo que el bebé murió por aborto

Oscar Casalla, abogado de los acusados, planteó que la muerte del bebé Isidro fue “intrauterina”. Y cargó contra Fernando Burlando.

La defensa de dos de los siete imputados por la salidera contra Carolina Piparo, que le costara la vida a su bebé Isidro Buzali, basó su alegato en que la muerte del bebé no fue producto del delito de homicidio sino de aborto, publica Diagonales.com. Se trata de Oscar Casalla, abogado de Juan Manuel Calvimonte, el presunto reclutador de los miembros platenses de la banda; y Augusto Claramonte, quien habría aportado la cobertura legal.

 

"Lo de Isidro no fue homicidio, fue un delito de aborto", dijo en el tramo más polémico del alegato, y profundizó diciendo que "la muerte de Isidro fue intrauterina no extrauterina". La postura se contrapone con la del fiscal Marcelo Romero y la de la víctima, quienes dieron por acreditado, en base a la testimonio de los médicos que la atendieron en el Hospital San Roque de Gonnet, que el balazo fue la causa directa de la muerte del bebé.

En otro de los tramos, Casalla alegó que "Isidro nació sin signos vitales, se lo reanimó y mantuvo vivo de manera artificial. No logró vida independiente, respondió a la medicación y terapia de oxígeno, lamentablemente esta es la realidad". Por eso consideró que el hecho debe ser encuadrado como "tentativa de homicidio simple y aborto".

Para intentar aliviar la situación de sus defendidos, el abogado también atacó la carátula de “asociación ilícita" y lo fundamento con tecnicismos y bibliografía de Eugenio Zaffaroni.
Después dedicó algunos párrafos a cada uno de sus defendidos.

“Esperamos que los abrace la muerte tras las rejas” ACÁ

 

Sobre Claramonte dijo que está con “falta de mérito” y en el juicio no se produjo nueva prueba. Sin embargo advirtió tener miedo: “La función que cumplía Claramonte en mi oficina, hoy la hace mi hijo y no se a lo que lo estoy exponiendo". Sobre Calvimonte recordó que "estaba a 15 cuadras del hecho”, y se preguntó “¿Cuál es el dominio del hecho?". Y en una sucesión de pregunta también intentó despegarlo del balazo contra Piparo: “En el presunto acuerdo previo de salir a robar, Calvimonte también acordó matar?". Manifestó entonces que su defendido “no tuvo dominio funcional en el ataque”, por lo que “no podía evitar ese ataque". 

En base a ese argumento, Casalla pidió que Calvimonte sea considerado “partícipe secundario del robo”, y planteó que no existen pruebas de que Calvimonte sea reclutador. “Sólo los dichos de (Luciano) López en su declaración", declaró. 

En el tramo inicial de su alegato, el defensor había cuestionado los allanamientos, “realizados si órdenes judiciales”, y desacreditado la “alevosía” pedida por Romero, porque “una embarazada no está en estado de indefensión”. En esa línea dijo que Piparo no fue elegida por su embarazo, sino por el dinero que retiró del banco. Finalmente, el abogado cuestionó duramente a su colega Fernando Burlando, de cuyo alegato, dijo, “tuvo conceptos rayanos a la discriminación". 

 

 

30 de abril de 2013