Llegó el Papá Noel anónimo que deja discos en la calle

Aparecen en lugares públicos a la espera de que alguien los encuentre. "La idea es compartir y liberar lo que uno escucha", dijo a 24CON.

Envuelto en un papel impreso que denota su calidad de “libre”, un disco espera sobre un banco de una plaza a alguien que quiera disfrutar de su música. Otro disco quedó en una parada de colectivo, y otro se codea con pequeños avisos publicitarios en un teléfono público. Disco Libre es un movimiento anónimo que busca lograr compartir música en cada rincón del Conurbano y la Ciudad de Buenos Aires.

Desde el 7 al 21 de diciembre un grupo de entusiastas comenzó a difundir su propuesta “Disco Libre”, paralelamente comenzaron a aparecer CD con música dejados en la vía pública, compartidos con quien quiera levantarlos y escucharlos. “La idea principal es compartir música, liberarse y liberar lo que uno escucha”, explicó a 24CON una de las integrantes del movimiento, quien prefirió el anonimato.

“Se trata de un acto poético en donde el fin máximo es compartir y liberar. Desprenderse de algo que es de uno, como lo es la música que cada cual escucha, para brindarla al mundo. Por otro lado es reivindicar al disco como objeto, que en la actualidad está en desuso”, apuntaron.

La fecha no surgió al azar, es una especie de homenaje a uno de los precursores del rock hecho en Argentina. En 1966, el 7, 14 y 21 de diciembre se celebró un festival organizado por Miguel Grinberg, poeta y periodista siempre asociado a la música y nuevas bandas. Él mismo le regaló a Disco Libre unas palabras que se transformaron en el manifiesto de cada CD regalado: “Hay que liberar la vida. Empecemos por el disco, ese objeto tan íntimo y tan de todos. Primero el disco, después todo lo demás”.

A través de un perfil de Facebook (facebook.com/libredisco), el grupo recibe fotos y comentarios de particulares que se sumaron a la movida y regalaron sus propios CD. Allí mismo se pude descargar una hoja imprimible que sirve para ensobrar el CD a regalar y explica los motivos del movimiento. “Hemos escuchado decir ‘Yo no participo porque nunca me encuentro un disco’, acá la idea pasa por otro lado. Es más importante el acto de liberar un disco preciado por uno que el hecho egoísta si se quiere de que si no encuentro un disco deja de tener sentido el movimiento. Desde Disco Libre no juzgamos, tampoco. Pero repetimos hasta el cansancio, que no hay fines de lucro ni de ningún tipo”.

Parte de la idea es mantener el anonimato para que el compartir no se adjudique a una persona, sino que sea un regalo encontrado en la calle. Ya hace unos años surgió una idea similar con libros que se mantiene hasta el momento, según confirmaron, fue un disparador. “En general son discos originales pero también los hay copiados. No conforma piratería ya que no hay plata de por medio. Es como si le grabaras un compilado a tu novia o a tu amigo ¿Eso es un acto vandálico? No creemos que sea así”.

Según explicaron, la idea de Disco Libre ayuda a difundir bandas nuevas, como también a revalorizar los espacios públicos, para que no sean solamente un lugar de tránsito, sino también un espacio para compartir música.

El movimiento y difusión finaliza el próximo viernes, pero la idea de los organizadores es que se difunda y se masifique. Han recibido consultas y comentarios desde otros países los que los ilusiona con pensar en que en un futuro se encuentren discos compartidos por todo el planeta.

19 de diciembre de 2012

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