Así le quedó el brazo a una nena mordida por un pony

Se acercó a acariciar al animal y todo terminó mal. Los médicos se descompusieron al ver la herida. Denuncian que en el zoológico "se borraron".

La familia de una nena de 4 años denunció que su hija fue mordida en un brazo por un pony mientras paseaban por el zoológico de Luján, por lo que debieron llevarla al Hospital Municipal con profundas heridas en su brazo izquierdo.

El hecho, que recién trascendió ahora con la difusión de la impactante foto, ocurrió el 24 de noviembre pasado. Zoe y sus papás fueron a pasar la tarde al zoológico, y según contaron, "alrededor de las 16.30" se dirigieron al corral donde se encontraban los caballos y los burros.

 

De acuerdo al relato, el pony se encontraba alejado del resto de los animales pero, cuando la familia se estaba por retirar de esa zona, se acercó hasta la cerca, por lo que la mamá de Zoe comenzó a acariciarlo. "Mi hija quiso hacer lo mismo, pero el pony giro un poco la cabeza y la mordió en el antebrazo izquierdo, arrancándole bastante piel y lastimándola mucho", relató el padre, Sergio Silva, al sitio Precinto 56.

El hombre explicó que enseguida levantó a su hija y empezó "a correr gritando y pidiendo auxilio",  porque "la gente que se encontraba en el lugar y los empleados del Zoo no reaccionaban".

Después de correr unos instantes, le gritó desesperado a un cuidador, que se encontraba dentro de la jaula de los leones cachorros, y éste lo llevó a un cuarto, donde le hicieron un torniquete a la nena.

La ambulancia llegó 45 minutos después y, según cuenta Silva, el médico que luego los trasladó "vio la herida y se descompuso".

"Llevaron a mi hija al baño para limpiarle la sangre y el doctor se quedó sentado, porque se había descompensado. Al arribar al hospital de Luján, "hubo un episodio similar con el médico que nos recibió", señaló el papá, y aclaró que un empleado del Zoo fue con ellos.
 
"El traumatólogo que cosió a mi hija no recuerda cuántos puntos. Cuando le pregunté, me dijo que había hecho puntos internos y externos", añadió.

La familia se mostró enojada con las autoridades del zoológico, ya que -según dijo- sólo los llamaron "al día siguiente, para preguntar cómo estaba Zoe, pero desde entonces no se volvieron a comunicar".

El padre de la nena recordó que, apenas ocurrido el incidente con el animal, le preguntó a un empleado del lugar por el pony y esta persona le respondió que "lo habían donado la semana pasada".

Sin embargo, la misma pregunta le hizo al encargado del zoológico que los había acompañado hasta el hospital, pero la respuesta fue otra, ya que le dijo que al pony "lo habían comprado".

 

5 de diciembre de 2012

 

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