Alejandra Winkhaus

"Algunos nacen con suerte. Otros, argentinos"

Alejandra Winkhaus trabaja con todo lo que tiene que ver con el arte.Se dedica al grabado pero también pinta, dibuja y da clases de plástica. Acaba de recibir el primer premio en el certamen Pequeño Formato organizado por la Municipalidad de Vicente López.

Alejandra Winkhaus se formó en la escuela Pueyrredón. Como dice ella: “El siglo pasado en la escuela Prilidiano Pueyrredón”. Usa la gráfica como lenguaje, tanto cuando pinta como cuando hace grabado. Ama su casa y su jardín con limonero, gato, perro y pastito. “Vivir en el conurbano me encanta. Es tranquilo, tengo luz, tengo una casa muy linda. Yo miro por la ventana y veo verde, mucha luz, es muy tranquilo. Tuve otros talleres en otros lugares y este es el que mejor me siento, esto me influenció, ver la luz, ver los colores”.

 

 

:-¿De donde nació la vocación de artista plástica?
:-Mi mamá dice que yo a los 4 años quería ser maestra de dibujo. A mí siempre me atrajo el arte, la pintura, yo miraba de chiquita, no sabía leer pero miraba las imágenes  de los fascículos de pintura. A los 14 años empecé un taller en el barrio con Paula Albarracín, dibujo y pintura. Después hice la carrera en bellas artes con especialidad en grabado.

 

 

:-¿Porque el grabado?
:-Creo que me atrapó. Yo pintaba y dibujaba y quería formarme más fuerte en dibujo. Entonces conocí a un muy buen dibujante que es Norberto Onofrio. El también es grabador. Cuando entré a su taller me atrapó la maquinaría medieval, la prensa de grabado, con toda una rueda que asemeja al timón de un barco, una platina. Y me mostró las tintas de grabado que son unas tintas espesas muy gráficas y yo pensaba esto parece un dulce de leche negro y las espátulas, después vi lo que se podía hacer con esos materiales, lo que es la gráfica, la imprenta, esto de dejar algo grabado, las incisiones. Me conecté con las maderas, las gubias, primero los materiales me fascinaron y cuando vi lo que se podía hacer con esos materiales el grabado me atrapó.

:-¿Que te hace diferente a los demás?
:-Por suerte me siento con pares, nunca me siento tan alejada, ni en las ideas o mismo en las imágenes, yo me encuentro con colegas y siento que tenemos una línea similar.
No podría decir que soy totalmente diferente sino que transito un equilibrio porque tenés influencias, tendencias, que no tiene que ver con la copia sino con lo par con sentirte afín.

:-Pero hay algo que te hace individualmente Alejandra Winhaus
:-Si, el tipo de línea. Uno tiene su carácter, así como tiene su tipo de letra, tiene su tipo de línea en la que manifiesta la forma. Y también desde la composición, muchas veces mis amigos me dan vuelta los cuadros y me dicen: esto está al revés. Tengo una tendencia a no utilizar una composición clásica u ortodoxa, lo que se espera. Mas que una transgresora me siento una desubicada. Hay algo que no me convence de esta realidad que vivimos, pero tranquilita yo lo doy vuelta la modifico, por ahí pasa.

 


:-¿Tenés dos hijas, pintas, trabajas, como haces?
:-Yo digo: algunos nacen con suerte otros nacemos argentinos, todo es difícil. Trabajo mucho, muchas horas, encarar los trabajos, llamar, proponerlos, llevar carpetas, cds, presentarme.

:- ¿Como haces para vender tus cuadros?
:-En general trabajo con lo que se llama “tiendas de arte”, tienen cosas de diseño, joyería, muebles, estos locales me permiten una venta mas o menos fluida. El precio quizás es el mismo que en una galería, pero el comprador entra más fácil porque es como un local, a veces la galería con ese silencio asusta un poquito, la gente que no habla, que si piso fuerte suena. Es más o menos lo mismo pero blando, el que mira puede estar al tanto de los precios.
Vender obra no es solo ganar plata, es que esa obra esta en otra casa, la obra mira a otra gente, yo digo que los cuadros también nos miran a nosotros. La obra circula, se mueve, todo eso es como que la obra vive crece, me gusta esta circulación de obra, tener tiempo materiales, a mi me gusta estar acá en el taller trabajando.


:-¿Qué artistas te influenciaron?
:-Y desde los de las cuevas (risas), Casi todos. En especial, Norberto Onofrio. Leon Ferrari, su actitud me influye. Y muchos argentinos, Noe, Nigro.


 

 

 

 

 

 

 

 

¿Me contás de tu premio?
:-Me gane el primer premio en grabado Pequeño Formato en el salón de Vicente López Pequeño formato se refiere a que la medida no pasa de 40 cm, todas obras chicas. Hay pintura escultura grabado y dibujo y yo me lo gane en grabado. La obra es una xilografía, se llama secreto de vigía. Es una estructura, como muchos de mis trabajos que tiene que ver con horizontes y estructuras, con el arriba y el abajo, es una estructura fuerte y vertical y todo el peso esta arriba.


:-¿El titulo, es el hijo o el padre de esta obra?
:-Viene de una época que trabajaba mucho con el horizonte y estructuras verticales, faros, torres. El vigía tiene que ver con estas estructuras que miran todo el entorno. Por eso lo de vigía, esta se llama secreto porque es chiquito y viene a hacer como la intimidad de esa historia. Mi apellido Winkhaus, es alemán. Hause significaba casa y wink es señal, o llamada. Por eso se lo asociaba a un faro, la casa de la llamada. Esto me gusta, porque yo dibujo muchos señalamientos estructuras en un horizonte. Tengo esto de mirar el entorno, la mirada hacia la lejanía.


Cuando yo era chica leí una leyenda, creo que era precolombina, decia que los primeros hombres creados por los dioses tenían unos súper poderes y podían ver mas allá. Veían y veían y veían todo. Pero esos poderes los volvieron tan vanidosos, que los dioses se los quitaron y terminaron viendo como vemos nosotros: algo, a la distancia y nada mas. Yo siempre pensé desde chica que alguna vez podría mirar y ver más allá, hacia el cosmos, hacia el infinito.