"A Martín Redrado lo recibí en Miami con un babydoll"

Los rumores de infidelidad sobrevolaron la relación de Luciana Salazar y Martín Redrado, después de que el economista fuera visto en un restaurante de Palermo junto a otra mujer, que resultó ser la cuñada de Nazarena Vélez.

Cuando sedifundió la noticia, Luli estaba en Miami. Hasta allá viajó su novio, aunque no se sabe si lo hizo para disfrutar del tiempo juntos o para calmar los ánimos caldeados de la rubia por las malas nuevas.

Entrevistada por AM, Luli explicó cómo fue el arribo de Redrado en la ciudad norteamericana. "Él llegó el martes (de la semana anterior). Súper temprano. Yo estaba en Babydoll cuando llegó. Se ve que le dieron una tarjeta abajo en la recepción, porque yo había avisado, y casi me agarra un síncope", contó.

La vedette - que, mientras hablaba por teléfono con el programa, estaba yendo de viaje a Chile por trabajo - explicó que le restó importancia a todas las versiones que se difundieron.

"Lo único que puedo decir es que estoy bárbara. Y no me voy a meter en un problema que no me lo busqué yo. A mí me nombraron injustamente. El protagonista habló y ya dijo lo que tenía que decir", agregó. Igualmente, reconoció le da algo de "cosa" que la prensa publique ese tipo de notas.

"Saben que él padeció todo esto de los medios, que en su momento también le costó mucho. Ahora de a poco se va a acostumbrando. Pero, cuando pasan todas estas cosas, en el fondo le terminan molestando a él que más a mí", aseguró.

En otra oportunidad, entrevistada por Intrusos a la salida del aeropuerto, le preguntaron qué opinaba de los dichos de Nazarena Vélez, que le dio cabida a los rumores. "Que sea feliz, le deseo lo mejor", respondió, categórica.

Sin embargo, todo indica que la exuberante rubia está furiosa con Naza y pretende que le pida disculpas al economista.

"¡Me importa un pito Redrado! No me interesa en lo más mínimo. No tengo ganas de pedirle nada", respondió la actriz en BDV.

"Yo tengo nada contra Luciana. Mi cuñada me dijo que no pasó nada y que no va a pasar. Es más, me dijo que no lo toca ni con un puntero láser. ¡Con esa cara!", agregó, lapidaria.

Luego reiteró que ambos cenaron juntos y que cada uno se tiene que hacer cargo. "Martín no sabe cómo contestar a una situación que está muy clara ¿Si él le tiró los perros? Bueno, eso no lo voy a contestar, porque no quiero hacer un daño innecesario a Luciana". Clarísima.

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