Temen una epidemia y el municipio guarda silencio
De cada 100 mil habitantes, 30 tienen tuberculosis. "Son enfermedades de la pobreza que no debe ocultarse por su costo político", dijeron a 24CON.
Una tos persistente, y un catarro que no se va. Los síntomas alcanzan los quince días y el enfermo no cambia. Los síntomas de la tuberculosis son simples, al menos aquellos que se perciben a primera vista. La enfermedad es producida por un bacilo lo suficientemente común a la historia de la humanidad que se la considera controlada. No obstante los casos se repiten en algunas zonas del Conurbano.
En el partido de Quilmes, el concejo deliberante se negó a elevar un pedido de informe para saber con exactitud cuantos enfermos de tuberculosis hay en el partido. Las dudas sobres lo números oficiales se iniciaron hace unos meses cuando un militante del MRT Santucho murió a fin de julio a raíz de esta enfermedad pulmonar.
“Los datos estadisticos los recabamos nosotros de hospitales publicos y clinicas privadas. En 2010 hubo 160 casos de tuberculosis. Entre 2008 y 2009 hubo 206 casos, lo que significa que cada 100.000 habitantes a 30 enfermos de tuberculosis”, explicó a 24CON el edil Mario Sahún (M.I FAP), quién presentó el pedido de informe negado por el oficialismo.
Según los datos adjuntados al pedido de informe, en la provincia de Buenos Aires se registran anualmente más de 5000 casos de tuberculosis. En el partido de Quilmes, otra problemática es el seguimiento de los pacientes y el abandono de los tratamientos, lo que conlleva al recrudecimiento de los síntomas en el paciente. “Una persona enferma, sin el correspondiente tratamiento puede contagiar a 15 personas al año”.
Las palabras del edil dentro del recinto no lograron convencer a los concejales para lograr el quórum que elevara el pedido de informe: “El Hospital Isidoro Iriarte cuenta casos detectados por docenas, algunos mortales como el del vecino Diaz, y otros que obligan a larguísimos tratamientos que no siempre se completan por falta de posibilidades asistenciales sostenidas en el tiempo. Quilmes es un foco de alarma”.
Según el concejal, la postura oficialista y el silencio del Intendente Francisco Gutiérrez responde al costo político que conllevaría reconocer una epidemia de esta enfermad dentro del partido del sur del Conurbano. Conocida desde la antigüedad, las medidas de higiene comunes a todas las localidades del Gran Buenos Aires deberían ser suficientes para evitar la propagación y el contagio, pero evidentemente no en todos los distritos se cumple con los parámetros mínimos.
“El silencio, en vez de solucionar el problema, lo acrecienta. Una franja amplia de la población que vive en condiciones infrahumanas, no podemos ocultarlo. Es una enfermedad curable, pero hay que tratarla”, finalizó Sahgun.
La tuberculosis es una infección bacteriana contagiosa que compromete principalmente los pulmones, pero puede propagarse a otros órganos. Es causada por el bacilo de Koch y se contagia por vía aérea, cuando las personas infectadas estornudan, tosen o escupen.
Los síntomas clásicos de la tuberculosis son una tos crónica, con esputo sanguinolento, fiebre, sudores nocturnos y pérdida de peso.
Se trata de una enfermedad curable siempre que exista un diagnostico temprano. El proceso de erradicación del cuerpo demora entre 6 y 12 meses, dependiendo del paciente y la ferocidad de la infección.
29 de agosto de 2012
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