Condenan a 22 años al asesino de Sandra Almirón
La fiscal del caso había pedido 33. El crimen de la docente ocurrió en 2009 en la puerta de su casa.
Sebastián Soto fue condenado a 22 años de prisión por el crimen de la docente Sandra Almirón, asesinada a balazos en 2009 cuando le robó el auto en la puerta de su casa de la localidad de Derqui, partido de Pilar. La sentencia fue dictada esta tarde por el Tribunal Oral en lo Criminal 2.
La fiscal de la causa había pedido que Soto (21) sea condenado por "homicidio en ocasión de robo, agravado por la participación de menores, por el uso de armas y por la participación de tres personas".
Alejandra Toymil dio por acreditado que el 28 de noviembre de 2009 la docente fue abordada por tres personas -dos menores y un mayor- cuando llegaba a su casa ubicada en Los Chingolos 1719, de Derqui, en el partido de Pilar, a bordo de su Chevrolet Corsa verde.
La fiscal dijo que los tres estaban escondidos entre los arbustos que hay en la esquina de la casa, donde la iluminación era escasa, y cuando la maestra abría el portón "la atacaron a golpes" cuando se encontraba en "total estado de indefensión".
Luego, a pesar de que la mujer estaba sola, le efectuaron un balazo por la espalda con un revólver calibre .38, el cual nunca fue encontrado por los investigadores. Tras el ataque, los agresores escaparon con su auto, el cual luego fue encontrado abandonado en José C. Paz, mientras que la víctima fue llevada al Hospital Austral de Pilar por un vecino, aunque murió.
La fiscal dio por probado que Soto intervino en el hecho porque él mismo así lo confesó en el juicio, aunque el acusado dijo que no fue a asaltar a la docente sino que se quedó escondido en la esquina y luego sus cómplices lo pasaron a buscar en el auto.
Soto declaró que esa noche había salido a robar con otros dos jóvenes por otro barrio, pero como no habían podido asaltar a nadie, fueron a la zona de Derqui donde vivía la maestra, a quien sorprendieron cuando regresaba de la casa de sus padres.
Según la versión del acusado, los dos adolescentes fueron a robar el auto, el vio un forcejeo, luego que le dispararon a la mujer y cuando huían lo pasaron a buscar en el auto de la víctima.
Pero la fiscal descartó esa versión en base a la declaración de vecinos de la cuadra que escucharon los gritos de Almirón, salieron a la calle o miraron desde sus ventanas lo que ocurría y vieron que tras los disparos el auto salió a toda velocidad hacia la ruta sin detenerse.
17 de mayo de 2012