Claudio María Domínguez: "Repudio toda secta"

El guía espiritual de los medios salió a defenderse tras el escrache. Su cruce con Marcela Tauro.

Pablo Salum, el joven que fue a la presentación del libro de Claudio María Domínguez y le inició un escrache del que el escritor y líder espiritual salió un tanto mal parado, hizo una aparición pública en el programa “Intrusos”.

Sobre lo ocurrido, el mediátio del espiritualismo dijo: “Yo ni me enteré hasta el final. Siempre había un bardero, menos mal que no nos arruinaron la maravillosa presentación del libro en la Feria. Sobre el Maestro Amor, los que lo aman lo aman y los que lo odian, lo odian. La Justicia no lo condenó”.

“Si preguntan, escuchen. Si no van a escuchar, fuck you. Nunca volvería a un maestro, el maestro de cada uno está en el corazón”, finalizó.

A raís de las críticas por estos comentarios, Domínguez puso la cara y charló con Jorge Rial en el ciclo de América.

“Si la pareja de alguno de ustedes, como mi ex mujer, la mejor madre de mis hijos varones, estuviese en una secta, ¿ustedes tienen la culpa? Segundo: ¿tengo por qué saber lo que hace?”, se defendió.

“Ella me dice que la vida es maravillosa, yo no puedo hacer nada, yo siempre le digo a la gente que raje de toda secta, no hagan yoga. Mi ex mujer tiene 48 años, que sea feliz”, manifestó.

 

A pesar de su postura conciliadora, Claudio tuvo un fuertísimo cruce con Marcela Tauro por unas declaraciones que ella había realizado en el programa. La panelista había contado que Domínguez, luego de hacerse una intervención, como no llegaba a ir al baño, había llegado a hacer sus necesidades en un tacho de basura, delante de sus compañeros de radio.

 

Luego de un ida y vuelta, ella le aseguró: "Vos me trataste de prostituta en la radio". "¿Vos pensás que te podría decir una cosa así a vos?", le respondió Claudio, y ante la respuesta afirmativa de Tauro, agregó: "Estás totalmente equivocada, jamás se me ocurriría decirte eso".

 

Aunque se pidieron disculpas, a los pocos minutos volvieron a enfrentarse: "Nosotros somos periodistas, vos vendes espiritualidad, yo no, y tenés que dar el ejemplo", interrumpió Tauro. A lo que él contesto: "¿Qué sería dar el ejemplo? Tengo el 99 por ciento del tiempo, repuestas amorosas, tengo mil llamados por día y respondo amorosamente, y una vez por año se me chispotea la chaveta. Ya pedí disculpas, ¿qué más sería conducta inapropiada?".

 

Por último, Claudio venía hablando de lo que le pasó cuando supo de la mediatización del escándalo en la Feria del Libro, y aseguró: "En el único momento que se me fue la presión en el pecho, fue cuando sentí que genuinamente yo los podía abrazar en amor". Marcela no se pudo callar y le dijo: "¡Mentira! No nos podés abrazar en amor si te molestó lo que dije yo de la radio. Me molesta que vendan una cosa que no son. Lo único que siento es que vos crees que sos Dios y viniste con una soberbia que la gente se está dando cuenta. Te crees superior". Él sólo respondió: "Es tu visión...".

 

"No nos vengas a decir que nos abrazas en amor cuando no es así. Viniste porque te obligaron", aseguró Tauro. "No, para nada. ¡Ahí te fuiste a la re mierda!", le devolvió  Dominguez: "Estoy acá por mi propia voluntad".

 

El conductor de Intrusos también le hizo saber su postura. "Por momentos siento que estoy hablando con un sobrecito de azúcar", le dijo sin vueltas. "Me tirás 500 frases", le argumentó. Domínguez admitió que a él no le gustaba estar sentado en su programa, que no comulgaba con ese tipo de formatos televisivos, y sobre el final, Rial le dijo: "A vos no te gusta este programa, a mí no me gusta lo que hacés, y está todo bien. Lo que te pido es más responsabilidad a la hora de difundir, porque es peligroso. Mientras hagas eso, está todo bárbaro".

 

 

 

 

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