La Plata
Quiso vender en Facebook una moto robada y lo detuvieron
La víctima se mostró como el principal interesado y arregló un encuentro con el ladrón.
Las redes sociales dan para todo. Incluso, pueden ayudar a la policía a detener a los delincuentes. El curioso hecho sucedió en el barrio El Mondongo, de La Plata. El ladrón había robado una moto el 27 de diciembre. Junto a un cómplice, pararon a la víctima y luego de amenazarlo escaparon con el rodado. Días más tarde, publicaron la moto en venta a través de Facebook a $2000. No sabían que esa acción los dejaría de cara a la justicia.
La investigación se inició con la denuncia de un joven que contó como poco antes del inicio del 2012, una tarde fue asaltado por delincuentes que actuaron armados, quienes lo obligaron a bajarse de la moto, en la que más tarde ellos mismos escaparon a toda velocidad.
La víctima en un primer momento intentó resistir el asalto, indicaron los voceros, pero uno de los agresores extrajo un arma de fuego y lo amenazó de muerte.
El damnificado abandonó el rodado y los atacantes escaparon en la moto, según las actuaciones, una Yamaha XTZ.
Mientras avanzaba la investigación, un testigo que además es conocido del damnificado, ofreció una serie de datos acerca de cómo la moto robada era ofrecida por apenas 2 mil pesos en la red social Facebook.
El denunciante ubicó en la red social al menor, a quien reconoció como su asaltante junto a un cómplice, y se contactó con él hasta ganarse su confianza.
Así combinaron un encuentro, en la zona de 7 y 72, en el que el joven asaltado le entregaría una suma de dinero al ladrón para recuperar la moto.
Sin embargo, el dueño de la moto decidió denunciar lo que estaba ocurriendo y una comitiva policial se apostó en 7 y 72.
El menor llegó al lugar del encuentro sin la moto robada, aunque con la intención de recibir parte del dinero que le habían prometido y luego sí devolver la moto para cobrar el resto de la plata.
Sin embargo, los efectivos que actuaron al mando del subcomisario Mario Aristiques, procedieron a la aprehensión del menor, que ya había sido reconocido por la víctima como uno de los autores del brutal ataque.
Más tarde, el magistrado que interviene en la causa ordenó el traslado del menor a la seccional octava, donde luego se procedió a la restitución del acusado a sus padres, aunque quedó involucrado en la causa.
14 de febrero de 2012
La investigación se inició con la denuncia de un joven que contó como poco antes del inicio del 2012, una tarde fue asaltado por delincuentes que actuaron armados, quienes lo obligaron a bajarse de la moto, en la que más tarde ellos mismos escaparon a toda velocidad.
La víctima en un primer momento intentó resistir el asalto, indicaron los voceros, pero uno de los agresores extrajo un arma de fuego y lo amenazó de muerte.
El damnificado abandonó el rodado y los atacantes escaparon en la moto, según las actuaciones, una Yamaha XTZ.
Mientras avanzaba la investigación, un testigo que además es conocido del damnificado, ofreció una serie de datos acerca de cómo la moto robada era ofrecida por apenas 2 mil pesos en la red social Facebook.
El denunciante ubicó en la red social al menor, a quien reconoció como su asaltante junto a un cómplice, y se contactó con él hasta ganarse su confianza.
Así combinaron un encuentro, en la zona de 7 y 72, en el que el joven asaltado le entregaría una suma de dinero al ladrón para recuperar la moto.
Sin embargo, el dueño de la moto decidió denunciar lo que estaba ocurriendo y una comitiva policial se apostó en 7 y 72.
El menor llegó al lugar del encuentro sin la moto robada, aunque con la intención de recibir parte del dinero que le habían prometido y luego sí devolver la moto para cobrar el resto de la plata.
Sin embargo, los efectivos que actuaron al mando del subcomisario Mario Aristiques, procedieron a la aprehensión del menor, que ya había sido reconocido por la víctima como uno de los autores del brutal ataque.
Más tarde, el magistrado que interviene en la causa ordenó el traslado del menor a la seccional octava, donde luego se procedió a la restitución del acusado a sus padres, aunque quedó involucrado en la causa.
14 de febrero de 2012