Vicente López

¿Qué hacer si se cruzan con el puma suelto por la calle?

Un especialista de Temaikén habló sobre el tema que tiene en vilo a Olivos. "Está perdido, desorientado y le teme a los perros grandes", dijo sobre el felino. ¿Por qué aún nadie lo fotografió?

Los vecinos de Olivos están tan sorprendidos como asustados. Varios aseguran haber visto a un puma caminando por los techos de la zona, a unas 10 cuadras de la Residencia Presidencial. Las personas salen cada vez menos de sus casas y, cuando lo hacen, miran hacia todos lados, en estado de alerta, por temor a toparse con el animal y ser atacados.  

La paranoia generalizada cobró más importancia en los últimos días, cuando Alejandra Rey, que vive en la calle Carlos Villate y Pedro Goyena, aseguró que el puma tomó esa esquina como “hábitat propio”, ya que se trata de un pulmón de manzana con muchos árboles y arbustos, entre los que se camuflaría para que nadie advierta su presencia.


La casa de esta mujer y las de otros habitantes del barrio tienen las paredes y portones del frente llenas de arañazos, que habrían sido provocados por el felino cuando afila sus garras por la noche y que, hasta ahora, serían la única evidencia concreta de su existencia, porque nadie fue capaz aún de fotografiarlo o filmarlo.  

Sin embargo, los que dicen haberlo visto en Olivos y algunas zonas linderas de Munro sostienen que es un animal adulto, de aproximadamente 80 centímetros de alzada, que está suelto por las calles desde principios de enero. La vecina que hizo la primera denuncia, el día 12 de ese mes, cuenta que un albañil le avisó que el puma estaba en su jardín y, cuando ella salió, lo vio trepado a un pino de la vivienda de al lado. “Vi sus ojos y escuché sus gritos”, afirma, tras lo cual llamó al 911.

A casi un mes de este episodio, todavía no hubo ninguna resolución. Desde la Municipalidad de Vicente López reforzaron la vigilancia con las cámaras de seguridad, para tratar de divisarlo entre los árboles. La Dirección de Zoonosis instaló jaulas con carne como señuelo y también pidieron asistencia al Zoológico de Buenos Aires y a Zoonosis de La Plata.  


 

Dudas y recomendaciones


A pesar de los testimonios de los habitantes, muchos aún se muestran escépticos. Es el caso de Gustavo Gachen, curador general del bioparque Temaikén. “Es extraño que todavía nadie haya registrado al animal, con lo fácil que es hoy sacar fotos con el celular. Los empleados de Fauna de la Provincia pusieron trampas y tampoco lo vieron, así que no se puede confirmar su presencia en algún lugar en particular”, señaló en diálogo 24CON.  

Aún así, aclaró que, “en el caso de que sea cierto, un puma silvestre no puede llegar nunca hasta el Conurbano bonaerense por sí mismo. La única manera sería que se le haya escapado a una persona y que ahora no se haga cargo, porque al tenerlo estaba incurriendo en un delito”, explicó. De hecho, en la zona en cuestión no hay ningún zoológico de donde pudiera provenir el felino. 

Además, brindó recomendaciones bien concretas para los vecinos. “Si uno se encuentra con el puma, nunca debería correr, porque al hacerlo le estaría demostrando que es una presa y el animal lo perseguiría, pudiendo atacarlo y herirlo. Lo correcto es alejarse y hacer cuanto antes la denuncia a Fauna de la Provincia de Buenos Aires”, aseguró. El número es 0221-429-5360.

“En estos casos nunca deberían existir ‘héroes’ que lo quieran capturar solos, pensando que tienen el conocimiento suficiente”, remarcó el especialista del parque temático de Escobar, y agregó: “Si no se lo acorrala o molesta, el puma no va a atacar, porque el hombre no es una de sus presas naturales”.

En cuanto a las características del felino, “es nocturno en su biología”, y si sale de noche es porque está tratando de “retomar su vida silvestre de la manera más favorable posible en la ciudad. Si hay mucha gente, va a tratar de escapar o salir. En una zona tan poblada, es muy loco que se pueda esconder. Está perdido y desorientado, así que debería dejarse ver”, insistió Gachen, reafirmando sus dudas.

En condiciones normales, el animal suele “afilarse las garras en los arboles para marcar su territorio, pero las marcas nunca son muy visibles, y definitivamente no lo hace en las paredes”, continuó.

Algunos vecinos también advirtieron que, desde la supuesta presencia del animal, comenzaron a ver muchos cadáveres de palomas y gatos por las calles. “La paloma sí sería una potencial presa del puma, pero los gatos sólo lo serían por no encontrar otra cosa”, indicó el hombre de Temaikén. Además, “le teme a los perros grandes, pero si son chiquitos, como caniches o chihuahuas, posiblemente corran la misma suerte que los gatos”, ironizó. 

Por el momento, en Vicente López sigue el alerta y la precaución, y el mayor temor es por los chicos. Una vecina hasta suspendió la fiesta de cumpleaños de su hijo, por miedo a que el puma llegue al jardín de la casa y le haga daño al nene y sus compañeritos.

Las trampas con carnada son renovadas diariamente por Zoonosis y, según Gachen, “mientras el animal no se deje ver, es la única forma de capturarlo. En cuanto exista la visualización, se puede pedir colaboración para atraparlo con rifles o dardos tranquilizantes”, finalizó.