Multarían al Papa por no usar cinturón de seguridad

Un alemán lo llevó a la Justicia luego de ver su imprudencia vial a bordo del Papamovil.

Tras la reciente visita de Benedicto XVI a su país natal el pasado mes de septiembre, un hombre de Dortmund, llamado Uwe Hilsmann, se hizo una pregunta "crucial". ¿Por qué no llevaba el Papa el cinturón de seguridad cuando recorrió el Estadio Olímpico de Berlín en el Papamóvil?

Jóvenes de toda Alemania habían acudido a la capital para escuchar al Sumo Pontífice. Y ahí estaba él, desfilando ante la multitud a cinco kilómetros por hora y sin el cinturón de seguridad bien abrochado, un detalle que mantuvo preocupado a Hilsmann durante dos meses y que lo llevó, finalmente, a contratar los servicios de un abogado, Johannes Sundermann, para efectuar la denuncia pertinente.

El nombre del abogado, traducido del alemán al castellano, significa "Juan Pecador", por lo que muchos consideraron que esa noticia publicada por un diario sensacionalista local era una simple broma. Sin embargo, una breve comprobación ante el juzgado de Freiburg im Breisgau demostró que la denuncia fue efectivamente presentada.

Al tratarse de un Jefe de Estado extranjero, el Papa disfrutaría de inmunidad en este caso y no recibiría la multa de 80 euros que le cae a cualquier alemán sorprendido en semejante falta. Pero el letrado cayó en la cuenta de que, además de jefe de Estado extranjero, el Papa sigue siendo tan ciudadano alemán como cuando era el Cardenal Ratzinger, y exige que sea multado.

 

Alega que cuenta con dos testigos presenciales dispuestos a certificar que efectivamente el Papa no llevaba cinturón y señala además que varias de las personas que acompañaban a Benedicto XVI en su visita, como el presidente de la Conferencia Episcopal Alemana, Robert Zollitsch, "con seguridad" también observaron esta infracción y podrían por tanto sustentar su testimonio, llegado el juicio.

 

El abogado se encargó de subrayar que la denuncia no tiene intención alguna de causar daños a Benedicto y que responde únicamente al espíritu de la legislación de tráfico vigente en Alemania. La denuncia tiene como fin, por lo tanto, garantizar la seguridad del Papa.

 

 

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