Encuentran rastros de ADN de Candela en la casa allanada en Hurlingham

El material genético estaba presente en los restos de comida que quedaron en el lugar. Mañana declaran los cinco detenidos por la causa.

La Justicia indagará mañana a los cinco detenidos por el asesinato de la niña Candela Rodríguez, mientras se conoció que se hallaron rastros de ADN de la menor en un bol con arroz hallado en un domicilio allanado.


La prueba confirmaría que que la niña fue mantenida cautiva en el galpón de predio situado en la calle Kiernan al 992, que tiene a su propietaria, Gladis Cabrera, entre las detenida, al igual que un carpintero, Ramón Altamirano, sindicado como el encargado de alimentar a la nena mientras estuvo cautiva.


En el interior de esa vivienda, allanada el jueves pasado, se secuestraron restos de comida y rastros orgánicos, que al ser analizados, se concluyó que pertenecían a Candela Rodríguez.


Cabrera y Altamirano, junto a los otros detenidos, serán indagados este miércoles por el fiscal Marcelo Talovaro. Las otras tres personas arrestadas son Gustavo Damián Valenzuela, carpintero de 44 años; Alfredo Monteros, tornero de 75; y Alfredo Monteros hijo, de 36, relacionados con una combi blanca secuestrada.


El vehículo, habitualmente utilizado para el reparto de alimento para mascotas, es sometido a una serie de pericias para tratar de determinar si fue utilizado en el trasladado del cuerpo de la nena.
Candela Rodríguez desapareció el lunes 22 de agosto de su domicilio de la localidad de Villa Tesei, partido de Hurlingham.


Después de una intensa búsqueda, en el que según las autoridades provinciales, llegaron a participar más de 1600 policías, el cuerpo de la nena fue hallado nueve días más tarde cerca de la intersección de Autopista del Oeste y Vergara.


La nena fue encontrada con signos de haber muerto por asfixia y, según el fiscal general de Morón, Federico Nieva Woodgate, su cuerpo parecía haber sido "lavado".

 

06 de septiembre de 2011