El escándalo sumó más gente a la causa de Agustín

El titular de Red Solidaria dio su punto de vista a 24CON. La palabra de los famosos luego del escándalo y las repercusiones de la polémica.

“La guita me la dan los giles”. Esa fue la frase que rebalsó la polémica de Javier Bustos Fierro, el padre de Agustín, luego de que se difundiera una fotografía en la que aparecía en un cabaret de Córdoba junto a una bailarina.

Al mismo tiempo, mientras transcurría esa misma noche, el millón de dólares que se logró juntar gracias a una fuerte campaña solidaria ya estaba depositado en el centro médico de Minnesota, destino al que este viernes viaja el chico junto a su madre para comenzar el tratamiento contra su voraz enfermedad: adrenoleucodistrofia.

El escándalo pasó a mayores. De la indignación de muchos de los que apoyaron la causa (entre ellos actores o figuras del espectáculo), hasta la intervención de la justicia en la fundación Un milagro para Agustín. Es que investigan si hubo un desvío de fondos para gastos particulares de Bustos Fierro.

Mucho fue lo que se habló del tema, y hasta se puso en duda si el caso podría condicionar el acto de solidaridad de los argentinos.

El conductor Jorge Rial saltó con los tapones de punta: “Me siento estafado”, lanzó en vivo. Por su parte, el actor Facundo Arana también se refirió al tema y pidió “separar los tantos”, aunque dejó entrever que muchos sintieron “bronca”. “Pero ya está”, instó a continuar con el apoyo a la familia.

El titular de Red Solidaria, Juan Carr, habló con 24CON sobre el tema: “A mi criterio es al revés, todo lo contrario. A partir de lo que pasó nos llamaron más personas para aportar para el más chico (Joaquín). Eso te conmueve, porque la gente sabe distinguir muy bien. Comprendo al que se sienta defraudado o triste, pero creo que todos saben que ahora estamos jugando una carrera contra el tiempo".

En tanto, Carr aseguró que lo primordial en un principio fue depositar el dinero cuanto antes, “porque los norteamericanos desconfían que un argentino pueda juntar tanta cantidad de plata”.


La urgencia tenía un porqué: el caso de Robertino, un chiquito salteño que padece la misma enfermedad, pero ya en estado irreversible. Cecilia, su madre, expresó en una carta que hizo pública en la prensa: “Puedo asegurar que quien colaboró con esta causa no debe arrepentirse, por más error que haya cometido su padre Javier, al cual no puedo juzgar”.


“La enfermedad es tan terrible como imparable, mi hijo no pudo hacerse el transplante y ojalá lo pudieran ver para comprender de lo que se habla, pero en este caso son tres hermanos atrapados en el mismo destino”, expresó.


“ROBERTINO VIVE EN ESTADO VEGETATIVO, internado en nuestra casa, sólo escucha historias que le leemos, responde con su parpadeo”, cerró.

 

05 de mayo de 2011