Partopeaje: nació un bebé en la autopista
Una mujer dio a luz esta tarde en una cabina de peaje de la Panamericana, ramal Pilar, y tanto ella como la criatura, un varón de unos 2,800 kilos de peso, estaban bien de salud según el informe preliminar del médico que los atendió.
El hecho ocurrió luego de que la embarazada, que circulaba en un auto particular por esa ruta a la altura de Pacheco, notó que había roto bolsa y el nacimiento era inminente, por lo que su marido pidió ayuda al personal de Autopistas del Sol, relató a Télam el vocero de Vialidad Nacional, Ernesto Arriaga.
Los empleados, que acudieron de inmediato, llevaron a la mujer a las oficinas del peaje, la acomodaron sobre una mesa y la asistieron en el parto, que se produjo cerca de las 16.50 y fue normal, detalló el portavoz.
Ya ocurrido el nacimiento llegó la ambulancia que había requerido el personal. Los profesionales completaron el procedimiento, consideraron preliminarmente que la madre y el bebé estaban en buen estado de salud y los trasladaron al hospital de Pacheco para su control.
Según relató Arriaga, la mujer estaba "asustada al principio, pero luego se serenó y tras el parto lloraba de alegría", mientras escuchaba a los improvisados parteros proponer nombres para la criatura, todos vinculados a la insólita circunstancia de su nacimiento.
El hecho ocurrió luego de que la embarazada, que circulaba en un auto particular por esa ruta a la altura de Pacheco, notó que había roto bolsa y el nacimiento era inminente, por lo que su marido pidió ayuda al personal de Autopistas del Sol, relató a Télam el vocero de Vialidad Nacional, Ernesto Arriaga.
Los empleados, que acudieron de inmediato, llevaron a la mujer a las oficinas del peaje, la acomodaron sobre una mesa y la asistieron en el parto, que se produjo cerca de las 16.50 y fue normal, detalló el portavoz.
Ya ocurrido el nacimiento llegó la ambulancia que había requerido el personal. Los profesionales completaron el procedimiento, consideraron preliminarmente que la madre y el bebé estaban en buen estado de salud y los trasladaron al hospital de Pacheco para su control.
Según relató Arriaga, la mujer estaba "asustada al principio, pero luego se serenó y tras el parto lloraba de alegría", mientras escuchaba a los improvisados parteros proponer nombres para la criatura, todos vinculados a la insólita circunstancia de su nacimiento.