Eslovenia entró al Mundial y festejó todo el Conurbano

A un minuto del final de la primera parte del partido de vuelta por el repechaje clasificatorio al mundial de Sudáfrica 2010, Dedic hacía delirar a toda Eslovenia con el gol que a la postre sería clasificatorio para la cita máxima del fútbol. Como si esto fuera poco, el rival en cancha era nada más ni nada menos, que Rusia.

Sin embargo, ese gol y esa clasificación no sólo se festejaron en Eslovenia, sino también en gran parte del Conurbano bonaerense y el país, que albergan a decenas de miles de eslovenos en distintos puntos del país (como Mendoza, Córdoba y Bariloche) y, sobre todo, del Conurbano (Ramos Mejía, La Matanza, San Martín, Vicente López, San Isidro, etc.).

Los originarios y descendientes de Eslovenia se concentran en asociaciones civiles que llevan a cabo actividades culturales. El presidente del Centro Esloveno de Ramos Mejía, Marco Selan, narra que esta comunidad posee un colegio primario que funciona los sábados por la mañana, "para todo lo que es el desarrollo de nuestra lengua y costumbres".

Asimismo, desarrolla un programa social deportivo para los jóvenes y otro para la tercera edad. Además, se realizan viajes de intercambio cultural de Eslovenia a Argentina y viceversa. "No es abierto al público en general", especifica.

"Somos una colectividad con orígenes en emigrantes políticos, post Segunda Guerra Mundial. Por eso preservamos nuestras tradiciones, porque no fue decisión propia la de irse, sino que había que huir de un régimen político comunista", detalla Selan.

En cuanto a la clasificación a la Copa del Mundo a disputarse en Sudáfrica, Selan destacó que "es una alegría muy grande para toda la comunidad eslovena en Argentina", ya que "al ser tercera generación de eslovenos en este país, el fútbol se ha arraigado bastante en la comunidad y clasificar a un Mundial no es poca cosa", explicó.

Asimismo, remarcó que para los eslovenos en general los deportes más populares son aquellos que se "juegan puertas adentro. Como el voley. Debido a cuestiones climáticas", aunque reconoció que "al haber logros en el fútbol, cada vez se va a ir popularizando más".

En el mismo orden desde La Matanza Mauro D'Agostín le cuenta a 24CON que "la verdad que no pude ver el partido porque estaba en la facultad, pero cuando me enteré de la clasificación me puse muy contento". Mauro es de descendencia eslovena por parte de su madre. "Hace unos cinco años que me integré a la comunidad. Fue luego de jugar un torneo allá. Es como un Mundial de colectividades eslovenas que se reúnen cada dos años. Salimos segundos, fue un a experiencia muy linda. Todo comenzó cuando un hombre convocó a unos 80 chicos de la colectividad y en la selección quedamos 20, los que viajamos", agrega.

Hay casi 2,5 millones de eslovenos, de los cuales 2 millones viven en su país y aproximadamente 35.000 personas en Argentina.