Cómo hizo Grindetti para revertir 15 puntos en dos meses

Si Néstor Grindetti tuviera que elegir un número para jugar a la Quiniela sería el 39: la tijera. Fue gracias al fuerte corte de boleta a su favor que el actual intendente de Lanús, y nuevamente candidato de Juntos por el Cambio, dio vuelta el resultado negativo que había obtenido en las PASO y logró la reelección frente a su competidor por el Frente de Todos. Con el 49,38% le ganó a Edgardo Depetri, que se llevó el 43,90%, en un distrito donde la fórmula presidencial Fernández-Fernández se impuso al macrismo por más de 20 puntos.

A Juan Manuel Seoane, que tiene 43 años y es dueño de una perfumería sobre la avenida Hipólito Yrigoyen, en el centro de Lanús, el resultado no lo sorprende. "Me pareció que hizo una buena gestión. Yo en 2015 no lo había votado, pero ahora sí. Venimos de muchos años de desidia en Lanús. Hace 20 años que tengo el negocio acá y nunca mejoraron nada. Una vez que alguien hace algo bien, hay que apoyarlo", dice Seoane, mientras atiende a una clienta que le pregunta entre risas si ya actualizó los valores con el nuevo dólar.

Para Grindetti, el resultado del domingo pasado significó una increíble remontada en relación con las PASO. Mejoró en 15 puntos su performance con respecto al 11 de agosto, cuando había alcanzado el 34% de los votos. Por eso, después de ese batacazo preliminar, Grindetti salió a la calle para hacer campaña al estilo "vecinalista". De impacto netamente local. Desde el entorno del intendente, reconocieron a LA NACION que fue una estrategia para despegarse de la fórmula oficialista a nivel nacional, con el objetivo de que la coyuntura económica no opacara la gestión del municipio durante los últimos cuatro años.

Históricamente, Lanús siempre fue uno de los bastiones más fieles del peronismo. Desde la restauración de la democracia, en 1983, gobernó como intendente Manuel Quindimil, que ya había ocupado el cargo entre 1973 y 1976. Lo sucedió el kirchnerista Darío Díaz Pérez, elegido en diciembre de 2007, y fue el jefe comunal del partido durante dos mandatos, hasta que lo desplazó Grindetti, en 2015.

Lanús es uno de los distritos bonaerenses con mayor densidad de población. Viven unos 500.000 habitantes en un territorio de 48 km2, con un gran déficit de espacios verdes. Los barrios, dicen los vecinos, son muchos y están pegados uno al lado de otro, con pocas plazas y parques que les den un respiro. Los asentamientos y las villas crecen: hoy, según datos oficiales, son 37. El último informe del Observatorio Social de la Universidad Católica Argentina (UCA) reveló que apenas el 14% de los jefes de hogar en las villas tienen un empleo formal y que hay un 80% de jóvenes que no completaron sus estudios secundarios.

En Lanús no hay shoppings. Los siete centros comerciales a cielo abierto concentran miles de locales de diversos rubros. La baja del consumo se sintió en estos últimos años. Lo reconoce también Eduardo Cohen, que tiene 65 años y es empleado de la mueblería Nueva Era, sobre la avenida Yrigoyen. "Vendemos menos, lo mismo que sucede en todas partes. Pero ahora en Lanús se hicieron cosas. Soy de Lanús de toda la vida y viví todos los gobiernos. Voté por la reelección de Grindetti y no corté boleta", confiesa el hombre. Pone como ejemplo la construcción del Puente Lacarra, una obra que se anunció hace 40 años y que reclamaban los vecinos de Villa Soldati y Lanús Oeste. El nuevo cruce sobre el Riachuelo, dicen, agilizó la conexión entre la Capital y la provincia.

En la cuadra de enfrente está El Palacio del Aluminio, que destaca con un cartel de neón los 70 años de historia en la zona. Fernando Cortini es empleado, vecino de Lanús desde que nació. Tiene 46 años, está casado y tiene un hijo. Con resignación y bronca por el mal pasar económico, su voto fue completo para el Frente de Todos. "En las PASO corté boleta a favor de Grindetti. Creo que hizo una buena gestión. Pero la verdad es que ahora no creí que pudiera revertir la situación. Pensé que ya lo tenía perdido, por eso no lo voté", explica.

Para Víctor Flores, que abrió su fiambrería Milano hace 8 años, a pocas cuadras de la municipalidad, que ganara Grindetti era lo esperable. "Lanús estaba en el olvido. Apoyo la gestión de Grindetti porque fue el único que hizo algo en todos estos años. Lo valoro", dice Flores, que reconoce que el corte de boleta salvó a Néstor Grindetti, al menos hasta 2023.

LaNacion