Raqueteras, las botineras de la elite

Las mujeres que alquilan un rato de su amor nacieron con el mundo, allá lejos y hace tiempo. Inolvidables noches con políticos, futbolistas, y ahora también tenistas.

Por orden de escándalos entres hombres públicos y mujeres accesibles, interesadas o simples trabajadoras, resulta difícil comenzar la nota sin mencionar al entonces presidente de los Estados Unidos Bill Clinton y las continuas arrodilladas de Mónica Lewinsky en la mismísima Casa Blanca.

También en el plano internacional aunque bastante más cercano en el calendario, otra intimidad que cobró estado público y levantó polvareda fue esa noche de sexo y sudor con tintes nacistas protagonizada por Max Mosley (presidente de la Federación Internacional de Automovilismo) y varias chicas.

De vuelta en estas latitudes hermosas, con famosas que llegan a la creme cada día más rápido (y paradójicamente duran menos día a día), sobran los casos. Claudio Paul Cannigia es uno de los pocos en los cuales un futbolista disfrutó de una botinera y luego se casó con ella, cómo olvidar a Mariana Nani y los baños con champagne. Ahora Maxi López con Wanda Nara y Sergio Romero con Eliana Guercio repitieron la historia, son los menos. Cualquier otro recuerdo es bienvenido. La mayoría aparece y desaparece como por arte de un polvito mágico.

Mientras piensa una pareja feliz, algunos nombres: Juan Román Riquelme, Oscar Ahumada, Rolfi Montenegro con una ex de la Tota Santillán, el propio Topo Gigio hace tiempo con Laura Franco (Panam), Sergio Kun Agüero con Eliana Guercio, Carlos Tévez-Natalia Fassi, o Lionel Messi con Luciana Salazar.

Justamente Luli incursionó en una nueva rama de las "eras", cambió los botines por las raquetas. El éxito del deporte blanco de los últimos meses que lo catapultó a Juan Martín Del Potro a la elite del tenis hizo que la rubia de senos grandes y turgentes se interesara en el chico de Tandil.

Sabido es, los chicos del court distan de los del potrero. Son o parecen ser el yerno ideal para cualquier madre. Así lo entendió otra rubia de escote prominente: Luisana Lopilato, que hace rato disfruta de un romance de ensueño con Pico Mónaco, parece la continuidad del noviazgo que hasta poco tiempo vivían Gastón Gaudio y la actriz Marcela Klosterboer (después de la consagración en el polvo de ladrillo de Roland Garros ante Mago Coria, el máximo logro del Gato).

Quienes también pasan sus ratos de la mano desde hace varios meses son Chucho Acasuso y esa preciosura de persona que es Agustina Córdova. Otro enamoradizo es Mariano Zabaleta, el morocho la pasa mal pobrecito. Amanece día a día cucharita con Jazmín de Gracia, la blonda de ojos celestes y cara angelical ex Súper M. mismo camino parecieran seguir Mariano Puerta y Luciana Aymar. Lucha hace tiempo colgó al rubio modelo esculpido a mano (tan tallado como insulso) y ahora goza con Marianito, aunque lejos estén de dar a conocer la relación y formalizarla.

Para el final y merecedores de un párrafo aparte, David Nalbandian y Guillermo Cañas. De pie por favor. El rey de Unquillo compartió cama más de una vez con Sofía Zamolo antes de cambiarla por la ex tenista (ahora modelo) Victoria Vanucci. Aplausos. Willy, de Ciudad Evita para el mundo, transpiró más de una vez con Fabiana Somprebom. Una brasilera que junto con la caipirinha, el choclo con manteca y sal de los vendedores ambulantes en la playa, y los garotos, ocupa una página en el libro de los mejores inventos cariocas. Palmas rojas, gritos, ovación.

 

 

15 de noviembre de 2008.