Un estudio norteamericano analiza el comportamiento de 16 mil hombres y chicas que buscan la felicidad sexual.
Tener relaciones sexuales, tanto para los hombres como para las chicas, es uno de los aspectos más importantes para lograr la felicidad y el bienestar. Sin embargo, también suele ser un problema, que nos quita el sueño.
Por muchas razones, muchas personas viven su sexualidad no a favor de su vida sino de maneras más bien complicadas, con temores, culpas y prejuicios, sin darse cuenta de que se trata de una actividad para disfrutar con la misma felicidad que alimentarse saludablemente o hacer ejercicio. La sexualidad es parte de la energía de la vida.
Dos economistas, David Blanchflower y Andrew Oswald, que se especializaron en la relación de Economía y con el comportamiento humano, investigaron la relación entre sexualidad, nivel socioeconómico y felicidad, buscando las variables de esa delicada fórmula del bienestar personal.
Las estadísticas consultadas incluyeron datos sobre comportamiento sexual y calidad de vida de 16 mil adultos norteamericanos (casados, solteros, divorciados, viudos y separados).
Entre otras observaciones, los investigadores encontraron que ese adulto norteamericano:
+ Tiene en promedio dos o tres relaciones sexuales por mes.
+ Los casados o en pareja tienen más relaciones sexuales que los solteros o los divorciados.
+ El sexo es un factor de felicidad más importante entre las personas con niveles educativos elevados que entre quienes tienen poca educación formal.
+ Las mujeres con mayor nivel educativo tienden a tener menos compañeros sexuales.
+ El número ideal de compañeros sexuales que una hombre o una mujer para ser feliz por año es 1. Según este análisis, basta tener un compañero o compañera sexual en 365 días para que una persona se sienta satisfecha y feliz al menos con respecto a su sexualidad.