Diego Buonanotte asumió hoy con "dolor" la noticia de la muerte de sus tres amigos que se accidentaron en el automóvil que conducía el sábado último bajo la lluvia. "Una psicóloga, acompañado de sus padres y un tío, le comunicó todo lo ocurrido. Lo asumió con mucho dolor pero era un paso trascendental que había que dar", reveló pasado este mediodía el médico jefe de River, Horacio Cavallieri a la puerta del Sanatorio de los Arcos, en Palermo.
Por otro lado, el fiscal de la causa, Carlos Colimedaglia, afirmó que ninguno de los testigos que declararon en la causa vio tomár alcohol al joven futbolista. "Los testigos que declararon en la causa y que lo vieron (a Buonanotte), no lo vieron tomar alcohol. No pueden aseverar que sí ni que no, simplemente dijeron no haberlo visto beber", dijo el fiscal.
Además agregó que el jugador y sus amigos estuvieron en un "lugar de esparcimiento nocturno en la localidad de Ferrer" antes del accidente. Allí habrían jugado al billar y al tiempo que Diego se tomó varias fotos con personas que se encontraban allí.
Era el momento tan temido por la familia llegó por la mañana. Buonanotte supo que sus amigos del alma Gerardo Suñé, Alexis Fulcheri y Emiliano Melo perecieron en el choque con el auto en la ruta 65 cuando volvían a Teodelina y tras pasar unas horas en el pueblo de Ferré.
El médico sostuvo que mañana será trasladado de terapia intensiva a una habitación en piso, se le permitirá tener acceso a la televisión y no descartó que la semana próxima sea intervenido por la fractura de húmero. Es que Cavallieri estima que seguirá evolucionando del traumatismo de pulmón derecho, ya que el edema viene absorbiéndose paulatinamente.
Desde hace un par de días, el futbolista venía preguntando sobre el destino de sus hermanos. Según el médico de River venía "sospechando algo", y los padres le decían que los chicos estaban delicados. Pero el cuerpo colegiado de psicólogos, una profesional que conoce al futbolista e integrantes del staff del Sanatorio donde está internado, acordaron no extender más la situación.
Cavallieri confió ante los periodistas que prefirió que en un momento tan sensible fueran la psicóloga y los padres los que le transmitan al futbolista y que recién después ingresó a la sala. "Lamentablemente era una noticia desagradable pero en algún momento había que comunicárselo" dijo y reveló que al encontrarse con el futbolista, ya conocedor del triste final de sus amigos, le describió que "había mucha gente que había estado pendiente y que supo conquistarse el cariño de toda la gente".
El médico confirmó que Buonanotte seguirá con asistencia psicológica y que de ser necesario está previsto "apoyo farmacológico". Ahora que Buonanotte tendrá acceso a las informaciones por la televisión, Cavallieri pidió respetuosamente a los periodistas que "sean prudentes con lo que dicen. Diego es un chico exitoso pero tiene 21 años, es una criatura". Inclusive admitió haberle dicho al jugador de "no engancharse con algunas informaciones". "Esto no es hablar mal de nadie pero a veces se pasan un poco de rosca", opinó el médico.
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