Quieren que se prohíba la pirotecnia en las fiestas
Siempre se toman dos ejes de discusión cuando llegan las fiestas. El primero es la combinación de alcohol y manejo, que se lleva decenas de vidas a diario, el segundo es el uso de pirotecnia. Pero cuando se habla de este tema lo que se pone en tela de juicio es si dichos fuegos artificiales son legales o no, y el mantenerse lo más distante posible de las detonaciones para evitar heridas.
Lo que por lo general no se discute es que el uso de dichos explosivos ornamentales también conlleva en forma inevitable otro problema, el maltrato involuntario a los animales.
Si alguien siente taquicardia, palpitaciones, temblores, náuseas, jadeo, salivación excesiva, desorientación y falta de aire, lo más común es que se llame a un médico. Si además a uno siente un terror imposible de resistir que lo obliga a correr despavorido sin parar, ya estaríamos hablando de un paciente psiquiátrico. Pero todos esos síntomas son los que sufren los animales al ser expuestos a la pirotecnia.
Andrea Sapirsztein, integrante del Círculo Abolicionista Vegano (CAV), y Alicia Sangineti, de la organización Especismo Cero unieron sus fuerzas para concientizar a la gente sobre el problema que genera en los animales el uso de explosivos y hablaron con 24CON al respecto.
“Cuando se detonan los cohetes en las fiestas al perro le duele, porque tiene una sensibilidad auditiva muchísimo mayor a la de los seres humanos”, explicó Sapirsztein. Su “compañera de armas”, Sangineti agregó al combo que “además se desorientan, no sólo por el ruido sino también por el olor a pólvora, ya que el olfato es el otro sentido altamente desarrollado en los animales”.
Por otro lado, las proteccionistas aseguraron que a la madrugada siguiente a las fiestas, si uno presta atención, hallará decenas de pájaros muertos en la calle, que fallecen a causa de paros cardíacos producto de la agitación extrema que les producen las explosiones. Lo mismo sucede con animales domésticos como los gatos. También cientos de aves abandonan los nidos, lo que hace que los huevos o pichones queden desatendidos y eventualmente también mueran.
“Bregamos por la abolición total de la pirotecnia, porque el problema no es si es legal o ilegal”, aseveró la representante de CAV, que además asegura que el 80% de los accidentes proviene del uso de explosivos habilitados oficialmente, por lo que en ese caso también habría otra razón para abandonar el hábito festivo.
Cómo cuidar a su mascota
Aunque la representante de Especismo Cero en Buenos Aires aclara que la mejor forma de cuidar a las mascotas a fin de año es no usar pirotecnia y que “a veces hasta rogamos que llueva” para evitar los estallidos mortales, las proteccionistas coinciden que lo ideal es quedarse con el animal durante la ráfaga de explosiones de medianoche.
“Hay quienes le dan sedantes a los animales pero eso no es recomendable, aunque si se hace hay que consultar a un veterinario porque el tipo de droga y dosis varían según el animal y su peso”, explican.
Además, en el caso de un perro “hay que mantenerlo en un lugar cerrado. No debe tener acceso a rejas, puertas o ventanas, porque lo más probable es que intenten escapar, y hubo varios casos de animales que saltaron por el balcón”, apuntó Sangineti. El lugar ideal sería un baño pequeño, y muchos recomiendan reproducir un sonido alternativo a las explosiones, como música.
El contacto con la organización Especismo Cero se puede realizar al e-mail: info@especismocero.org “Aunque nos llaman utópicos y extremistas, como cuando planteamos que no debería haber circos con animales, hoy en la Ciudad de Buenos Aires eso está prohibido. Así que seguiremos avanzando para que también se prohíba el uso de pirotecnia”, recalcó Sapirsztein.
Lo que por lo general no se discute es que el uso de dichos explosivos ornamentales también conlleva en forma inevitable otro problema, el maltrato involuntario a los animales.
Si alguien siente taquicardia, palpitaciones, temblores, náuseas, jadeo, salivación excesiva, desorientación y falta de aire, lo más común es que se llame a un médico. Si además a uno siente un terror imposible de resistir que lo obliga a correr despavorido sin parar, ya estaríamos hablando de un paciente psiquiátrico. Pero todos esos síntomas son los que sufren los animales al ser expuestos a la pirotecnia.
Andrea Sapirsztein, integrante del Círculo Abolicionista Vegano (CAV), y Alicia Sangineti, de la organización Especismo Cero unieron sus fuerzas para concientizar a la gente sobre el problema que genera en los animales el uso de explosivos y hablaron con 24CON al respecto.
“Cuando se detonan los cohetes en las fiestas al perro le duele, porque tiene una sensibilidad auditiva muchísimo mayor a la de los seres humanos”, explicó Sapirsztein. Su “compañera de armas”, Sangineti agregó al combo que “además se desorientan, no sólo por el ruido sino también por el olor a pólvora, ya que el olfato es el otro sentido altamente desarrollado en los animales”.
Por otro lado, las proteccionistas aseguraron que a la madrugada siguiente a las fiestas, si uno presta atención, hallará decenas de pájaros muertos en la calle, que fallecen a causa de paros cardíacos producto de la agitación extrema que les producen las explosiones. Lo mismo sucede con animales domésticos como los gatos. También cientos de aves abandonan los nidos, lo que hace que los huevos o pichones queden desatendidos y eventualmente también mueran.
“Bregamos por la abolición total de la pirotecnia, porque el problema no es si es legal o ilegal”, aseveró la representante de CAV, que además asegura que el 80% de los accidentes proviene del uso de explosivos habilitados oficialmente, por lo que en ese caso también habría otra razón para abandonar el hábito festivo.
Cómo cuidar a su mascota
Aunque la representante de Especismo Cero en Buenos Aires aclara que la mejor forma de cuidar a las mascotas a fin de año es no usar pirotecnia y que “a veces hasta rogamos que llueva” para evitar los estallidos mortales, las proteccionistas coinciden que lo ideal es quedarse con el animal durante la ráfaga de explosiones de medianoche.
“Hay quienes le dan sedantes a los animales pero eso no es recomendable, aunque si se hace hay que consultar a un veterinario porque el tipo de droga y dosis varían según el animal y su peso”, explican.
Además, en el caso de un perro “hay que mantenerlo en un lugar cerrado. No debe tener acceso a rejas, puertas o ventanas, porque lo más probable es que intenten escapar, y hubo varios casos de animales que saltaron por el balcón”, apuntó Sangineti. El lugar ideal sería un baño pequeño, y muchos recomiendan reproducir un sonido alternativo a las explosiones, como música.
El contacto con la organización Especismo Cero se puede realizar al e-mail: info@especismocero.org “Aunque nos llaman utópicos y extremistas, como cuando planteamos que no debería haber circos con animales, hoy en la Ciudad de Buenos Aires eso está prohibido. Así que seguiremos avanzando para que también se prohíba el uso de pirotecnia”, recalcó Sapirsztein.