Denuncian que TBA intentó sobornar al maquinista

Muchos dicen que es lo que no se quería contar en los Tribunales Federales de Retiro. Lo que se estaba esquivando o tratando de ocultar. El asunto que en la tragedia ferroviaria de Once no debería ver la luz se transforma hoy en una turbulenta duda que salpica a la cúpula de TBA. ¿Intentaron sobornar al maquinista para que se autoculpara?

Pese a la intervención de la empresa, la mira puesta en su posible responsabilidad parece haberse disipado antes de tiempo. Asunto que dejó más dudas que certezas. Los hermanos Cirigliano salieron airosos hasta el momento y el único que quedó en el banquillo de los acusados por la muerte de 51 personas y más de 700 heridos es Marcos Córdoba, el motorman.

Aunque podría ser justamente la mesa chica de TBA la titiretera de una oscura maniobra en un desesperado intento de “caer parados”. La causa tomaría otro rumbo si se confirma la denuncia que realizó la periodista Mercedes Ninci en el juzgado de Claudio Bonadío: “Un familiar de Córdoba me confesó que TBA intentó sobornarlo para que se culapara así mismo”, dijo en exclusiva a 24CON.

El testimonio –cuenta la periodista- fue recabado durante un intento profesional por obtener una exclusiva con el chofer. “El chico que me lo contó estaba aterrado, dijo que tenía miedo porque no sabía lo que podía pasarle a su familia”, señaló la conductora radial.

Según su relato, “alguien de la empresa (no quisieron decirle quién) se acercó hasta la casa de Córdoba” y le puso una jugosa suma de dinero a disposición para sobornarlo. Hubo dos intentos: “Primero le propusieron 300 mil dólares para que se hiciera cargo de la culpa, pero ante la negativa de la familia, esta persona dijo que había 6 millones de pesos si se declaraba culpable”, contó Ninci. Esta última suma también fue rechazada.

Era viernes por la tarde cuando la periodista se enteró de la presunta tramoya elucubrada por la concesionaria del ferrocarril. Aguantó todo el fin de semana y el lunes por la mañana se tomó el 106 hasta Comodoro Py 2002. Golpeó en el recinto del juez Claudio Bonadío con la clara intención de hacer su denuncia. “Me pidieron que primero la hiciera pública –continúa-, que la dijera al aire, pero quise dejarla asentada formalmente”.

Su idea, reveló, era que cuando Bonadío lo cite a declarar a Córdoba le consulte sobre esta maniobra fraudulenta.

Córdoba fue puesto en libertad el 24 de febrero por falta de mérito. Tras ser dado de alta de la clínica Fitz Roy, donde estuvo internado a causa de las lesiones que sufrió en el accidente e incomunicado y con custodia policial, el motorman fue llevado a los tribunales para declarar ante el Juez.

“Están aterrados –dijo Ninci sobre la situación emocional que vive Córdoba y su familia- porque todos son ferroviarios, desde el abuelo hasta el nieto, y tienen miedo que la empresa tome represalias”.

¿EXTORSIÓN?

De confirmarse esta versión, el supuesto apriete podría convertirse en un caso de delito extorsivo. Así lo detalló a este medio el abogado representante de al menos 270 víctimas de la tragedia, Gregorio Dalbón.

“Tiene una pena de prisión de uno a diez años porque ello podría generar un falso testimonio. Es de uso y costumbre de TBA el tratar de arreglar todo con dinero. Que se lo ahorren porque los daños y perjuicios que le ocasionaron a las víctimas, hasta ahora, les está costando unos $1300.000.000”, explicó el letrado.

Para Dalbón lo que intenta hacer la empresa es forzar el cambio de calificación de la causa donde se lo imputa a Córdoba. Su estado procesal, hasta el momento, “es culposo y tiene una pena de hasta cinco años de prisión. Aunque podría cambiar a estrago doloso, de hasta 25 años de prisión. Lo mismo si se califica como ‘homicidio simple’”.

“Es típico de una empresa acorralada que tiene el 60 o 70 por ciento de la culpa estos tipos de maniobras. Tratan de sacarse de encima la faz penal y civil. Los hermanos tienen que ser citados y juzgados”, finalizó Dalbón.

 

29 de marzo de 2012