Néstor Grindetti, titular del Palacio de Hacienda porteño, informó al jefe de gobierno que el lanzamiento de una nueva emisión del exitoso Bono Tango (que no cayó en default y tuvo una buena calificación) seguirá demorado.
Se trata de u$s 500 millones que el gobierno macrista quiere tener en septiembre en el mercado para financiar obras de infraestructura social. Para ello necesita la firma del gobierno nacional para certificar la buena situación fiscal de la ciudad.
Esto también complican la construcción de nuevas líneas de subtes. Es que el Ejecutivo porteño se comprometió a un endeudamiento de u$s 1.500 millones, mediante un préstamo del BID, que también ya aprobó la Legislatura porteña, pero que requiere el aval de Nación.
De esa cifra, 500 millones de pesos iban a ser otorgados desde el gobierno nacional a la ciudad.