Desde las 0 de 2009, rige en la Ciudad el sistema de scoring mediante el cual todos los conductores con licencia porteña recibirán 20 puntos y cada vez que cometan una falta los mismos se restarán y correrán el riesgo de perderla hasta por dos años además de pagar multas y recibir sanciones. Una de las peores faltas es el exceso de ingesta de alcohol, ya que resta la mitad de los puntos de la licencia.
En el caso de los conductores que hablan por celular se les descontará cinco puntos, y de pasar un semáforo en rojo la persona no sólo restará cinco puntos sino que sumará una contravención, por lo cual sufrirá una pena o castigo que va desde el trabajo comunitario hasta la prisión. Aquella persona que pierda el total de los puntos recién a los dos años podrá recuperar la licencia de conducir y que, en todo caso, si quiere recuperarla antes deberá hacer cursos de manejo. “Si al año el conductor quiere volver a tener la licencia se puede hacer una serie de cursos para recuperar de a cuatro puntos”, expresó Guillermo Montenegro, ministro de Seguridad porteño.
Con respecto a las foto multas, Montenegro dijo que “no entran en el scoring porque la persona que excede la velocidad deberá ser identificada y detenida en el mismo momento”. En este sentido, señaló que desde el gobierno "se está generando un sistema de postas con dos tipos de máquinas, una que lee y otra que reproduce 200 metros más adelante para que el auto sea detenido y se proceda a la identificación del conductor".
31 de diciembre de 2008